Dwellings in Toledo

In designing this set of homes we start from the assurance that all work comes and must belong to a LANDSCAPE, to a place. The best architecture is that, without renouncing its rationale, remains and belongs to the site for which it was designed.

The housing project, rather than set up as a closed building leaving a playground inside, chooses to open to the exterior landscape decomposing in five volumes, a dihedral to the north and three south elliptical bodies to the south.

It is to the north where two linear buildings close the site and establish a relationship with a more regular city, while in the south, three elliptical buildings glide helping to dilute the set in the whole landscape of vineyards which enters to them.

The elliptical buildings trap inside water courtyards, real WETLANDS, ensuring a quiet and serene atmosphere to which houses open. These wet spaces operate as thermal regulators and generate an atmosphere of freshness and silence. The courtyards are designed to not be stepped on, are places for contemplation, for resting.

The rest of the not occupied site is used as community gardens space, swimming pool and playground. But the character we want to give to these open spaces is the continuity with vineyards next, wrap the Natural Landscape within our solar homes.

The colors of the vineyards and olive trees pollute the facades of the elliptical buildings that soften and pierce in a rectangular prefabricated cells system, deep and permeable. A series of galleries and terraces enjoy as shaded and ventilated places, this true "honeycomb" of concrete cells and colors taken from the natural environment.

The roofs of three buildings elliptical, leveraging its large linear development, are defined as community sports areas with running or bike tracks, or exercise and maintenance areas.

Ultimately, a new residential building must attend not only to the best roominess and comfort standards, but it should aim to create spaces where sustainability could be seen as a sensible way to read environmental clues where it belongs.

The homes are not intended to be presented in one place but WITH THE PLACE.

Al concebir el conjunto de viviendas que presentamos partimos de la seguridad de que toda obra surge y debe pertenecer a un PAISAJE, a un lugar. La mejor arquitectura es aquella, que sin renunciar a su razón de ser, permanece y pertenece al sitio para el que fue pensada.

El proyecto de viviendas, en lugar de configurarse como una edificación cerrada dejando un patio en su interior, opta por abrirse hacia el paisaje exterior descomponiéndose en cinco volúmenes, un diedro hacia el norte y tres cuerpos elípticos hacia el sur.

Es hacia el norte donde dos edificios lineales cierran el solar y establecen una relación con la ciudad más ordenada, mientras que hacia el sur se deslizan tres edificios elípticos que ayudan a diluir el conjunto hacia el paisaje de viñedos que penetra hasta ellos.

Los edificios elípticos atrapan en su interior unos patios de agua, unos auténticos HUMEDALES, que garantizan una atmósfera tranquila y serena hacia la cual se abren las viviendas. Estos espacios de patios húmedos operan como reguladores térmicos y generan un clima propio de frescor y silencio. Los patios son concebidos para no ser pisados, son lugares para la contemplación, para el descanso.

El resto del solar no ocupado se utiliza como espacios comunes ajardinados de la comunidad, con piscina y áreas de juegos. Pero el carácter que se quiere dar de estos espacios abiertos es el de continuidad con los viñedos próximos, que el PAISAJE natural envuelva dentro de nuestro solar a las viviendas.

Los colores de los viñedos y los olivos contaminan las fachadas de las elipses que se ablandas y perforan en un sistema de celdas prefabricadas rectangulares, profundas y permeables. Un conjunto de galerías y terrazas disfrutan, como lugares en sombra y ventilados, de este verdadero “panal” de celdas de hormigón y colores tomados del entorno natural.

Atendiendo a los más exigentes requerimientos de eficiencia y ahorro energético, hemos configurado este sistema de HUMEDALES en los patios y fachadas perforadas con viviendas profundas y ventiladas, complementado con la captación de energía solar mediante paneles solares que ocupan la cubierta de los dos edificios lineales ubicados en el extremo norte del solar.

Las cubiertas de los tres edificios elípticos, aprovechando su gran desarrollo lineal, se definen como las áreas deportivas de la comunidad, con pistas de atletismo, bicicleta o zonas de ejercitación y mantenimiento.

La relación de los edificios con el suelo del lugar es a través de porches pavimentados en sombra, ventilados y frescos en suave pendiente como sucede en el solar. El carril de bicicleta se introduce en ellos apareciendo grandes áreas protegidas de aparcamiento de bicicletas.

En definitiva, una nueva edificación residencial debe atender, no sólo a los mejores standares de habitabilidad y confort, sino que debe aspirar a generar espacios donde la sostenibilidad se entienda como un saber leer de forma sensible e inteligente las claves del entorno donde se inserta.

Las viviendas que presentamos no pretenden estar en un lugar sino CON EL LUGAR.